El Tesoro de San Borondón es un juego con fin solidario que salió adelante en un crowfunding. Os cuento un poquito sobre él… Mi querida Noe Blanch me preguntó si quería probar el prototipo de este juego y ver algunas posibles adaptaciones del mismo. Como os podéis imaginar, mi respuesta fue un «SÍ» inmediato. No siempre se tiene la oportunidad de probar un prototipo y de conocer más de un juego que aún no está en el mercado. Y si además, detrás de él está Emiliano Labrador, todo pintaba muy bien…

Pues bien, jugué el prototito, tengo el juego y  ¡Me encanta! Además, he tenido la posibilidad de jugarlo con algunos de mis menores en intervención y talleres.

¿Qué es lo que más me gusta de El Tesoro de San Borondón?

• Juego solidario con una asociación que hace una labor maravillosa, Ayudar Jugando (Os recomiendo seguir sus andaduras porque hacen muchas cosillas). Con esos fondos tratarán de ayudar a causas que ellos apoyan y en las que participan.
• Es un juego cooperativo y esto le da un puntito especial.
• Este juego te permite disfrutar y pasar un rato divertido en familia o con amigos.
• Es un juego en el que podemos jugar en pareja y hasta un grupo amplio (es de 2 a 8 personas). Lo que nos permite sacarlo a mesa en un encuentro o evento familiar o social.
• Aporta aprendizajes significativos (ya os lo contaré más abajo).
• Es un juego a emplear en diferentes contextos, ya sea en el entorno familiar, social, en el aula o, como es mi caso, en el ámbito psicopedagógico.

Durante el desarrollo del juego trabajaremos en equipo, siendo una expedición de valientes, que llegamos en globo a una isla. Nuestro objetivo es encontrar un fabuloso tesoro. Para ello tendremos que ir moviéndonos por un terreno peligroso, en el que nos encontraremos con fauna y flora diversa, pero también con lava del volcán. Esa lava se desprenderá de un lado u otro del terreno, en función de la rosa de los vientos que es girada al final de cada ronda (y os aseguro que esto hace que muchos planteamientos se vean trastocados por algún objetivo marcado).

El movimiento se realiza a través de 49 losetas que componen el juego y el tablero sobre el que moverse. Entre esas losetas están el globo, loseta que supone el inicio de nuestra aventura y a la que debemos llegar una vez conseguido el tesoro. Y por otro lado, la loseta del volcán en el centro del tablero.

Además de esto, contamos con fichas del mapa del tesoro, que nos indicarán puntos del tablero donde debemos encontrar parte del tesoro. También, tenemos que contar con un buen equipamiento gracias a la mochila con diversos objetos surgidos al azar. Estos objetos nos ayudarán a superar algunas dificultades con las que nos vayamos encontrando.

Pero no todo va a ser sencillo para movernos por la isla… Hay cartas de evento y peligro que nos complicarán mucho la partida. En ellos se verá la importancia de la ayuda y el apoyo entre los aventureros que se han adentrado en esta aventura.

Además de todo esto, algo que tiene este juego es que fomentaremos:

• Trabajo en equipo. Recordemos que es un juego cooperativo, entre todos debemos conseguir el tesoro y abandonar la isla.
• Comunicación verbal. Hay que intercambiar opiniones, ver las diferentes opciones a seguir y cómo, buscar ayuda y apoyo… Siendo muy importante y cogiendo peso esos diálogos entre las personas, así como las posibles instrucciones y pautas establecidas conjuntamente.
• Comunicación no verbal. En algunos casos estaremos sin poder hablar, ¿recordáis los peligros a los que nos enfrentaremos? Pues eso, que las miradas y algunos gestos darán información relevante a nuestros compañeros.
• Atención. Saber muy bien dónde vamos, cómo podemos llegar, fijarse en los movimientos de los compañeros… Esta capacidad nos ayudará mucho, no podemos quedarnos despistados pensando en que otros se moverán, porque si cogemos ese planteamiento estaremos influyendo en el desarrollo del juego y haciendo flaco favor a los compañeros.
• Memoria. Recordar todas las acciones que podemos hacer en nuestro turno, así como lo que podemos hacer para ayudar a las demás jugadoras, los diferentes pasos a seguir…
• Orientación espacial. Cómo desplazarnos, por dónde nos va a limitar la lava activada a través de la rosa de los vientos, delimitar los movimientos en el tablero… La orientación espacial en este juego es clave y se ve muy reforzada porque continuamente estamos trabajándola con los diferentes movimientos que se realizan. Además, se verá más fortalecida si la expresamos verbalmente con los pasos y movimientos que hacemos.

Antes de terminar… Enhorabuena al equipo que estás detrás de este proyecto y de El tesoro de San Borondón, Ayudar Jugando, Emiliano Labrador, Noemí Blanch y muchos más…