Unánimo, un juego de conexión mental… Así se define este juego de mesa creado por Ora Coster y Theo Coster, y distribuido por Brain Picnic y Zacatrús.

Por qué un juego de conexión mental…

Porque hay que intentar descubrir qué palabras son las que asocian a un tema dado, las personas con las que jugamos. Y es que cuanto mayor sea la conexión, mayor será la puntuación.

En concreto hay que identificar, pensar o asociar ocho palabras a la palabra o tema dado. Parece fácil, pero (os aseguro que) no lo es…  Si queréis conocer más sobre este juego, su mecánica, componentes, os animo a visitar este vídeo de Zacatrús en el que lo explican fabulosamente.

Unánimo se ha convertido en un básico dentro de mi ludoteca de trabajo (y en casa también). Y es que a través de este juego puedo trabajar aspectos relevantes del aprendizaje con mis menores. Aunque el juego es para más de tres jugadores, lo adapto para las sesiones individuales buscando la conexión con cada menor en el tema dado o en el que me interese trabajar.

No solo en sesiones individuales, os puedo asegurar que en talleres, con menores y adolescentes, también funciona muy bien. Incluso en formaciones con profesionales me ha permitido conocer más sobre temas de interés y el estado del grupo.

Como habéis visto en el vídeo, el juego contiene 55 cartas de doble cara de tema, en total 110 palabras de temas diversos. Así que podemos analizar y ver cómo conectamos con personas sobre una gran variedad de temas. Tener un juego en el que haya temas variados, permite adaptaciones fáciles en cuanto a temas que nos puedan interesar. 

Por ejemplo, se pueden seleccionar tarjetas de temas o palabras según la edad de las personas con las que juguemos. Y es que algunas palabras pueden ser complicadas para menores más peques (os lo comento por experiencia personal).

No solo eso, se pueden presentar temas nuevos según los intereses y necesidades del grupo, atendiendo a objetivos o contenidos (incluso de aula) que se quieran trabajar. Y es que se puede emplear este juego para hacer un repaso de un tema concreto, o bien para indagar qué se conoce sobre un área específica.

Por ejemplo, si queremos saber qué sabe un grupo sobre emociones y cómo interpretan que piensan las personas del grupo, podemos crear una tarjeta del tema. Este ejemplo es una adaptación que he llevado a cabo con un grupo de alumnos y alumnas de un posgrado en el que he impartido un módulo.

Otro ejemplo para trabajar e intervenir con menores, sería crear una tarjeta de tema acoso escolar… Qué pensarán las personas sobre el tema, sobre todo menores adolescentes, pero deberán identificar qué pensarán otras personas del grupo para así puntuar más…

Como se puede ver, a nivel grupal (independientemente de la edad) podemos atender temas diversos con el grupo, relaciones y conocimiento entre las personas. Además de poder adaptarlo para trabajar temas o contenidos de aula que interesen.

Pero… Por qué me gusta emplear Unánimo en mis intervenciones psicopedagógicas individuales…. Por varios motivos:

• Trabajamos la fluidez verbal y vocabulario. Deben surgir ocho palabras relacionadas con el tema, esto requiere tener vocabulario y rapidez en buscar, identificar y recoger palabras asociadas.
• Conocimiento de temas. Hay temas y palabras que no son del día a día, ni habituales, de ahí que haya que reflexionar sobre temas diversos. Además, me permite conocer qué conoce cada menor de un tema y qué piensa que sabemos las demás.
• Teoría de la Mente. Ponerte en el lugar de la otra persona, qué experiencias y aprendizajes tiene para dar respuesta a un tema. Es curioso ver ese análisis por parte de menores hacia las personas adultas. Pero también es curioso analizar cómo pueden pensar e interpretar las personas adultas un tema.
• Reflexión propia y ajena. No son solo las palabras que una persona piensa, hay que conectar con las demás personas. Por ello, hay que reflexionar sobre el tema por una misma, pero también reflexionar sobre qué piensan o conocen las otras.
• Identificación de palabras clave. Asociar palabras a un tema es importante, y esto es un punto a trabajar con estudiantes. De ahí que podamos adaptar este juego a contenidos de aula o de temas de interés.
• Escritura. Hay que escribir las palabras y es una forma en la que favorecemos la escritura de menores a los que les puede resultar más complicado o aburrido escribir.
• Expresión oral. Me gusta que se explique alguna palabra, que es sorprendente o llamativa. Trabajar la expresión oral y la explicación de contenidos a las personas dando sus razonamientos.

Todos estos puntos son importantes en el aprendizaje y desarrollo de procesos cognitivos. Además, Unánimo es un juego rápido, dinámico y sencillo de explicar y adaptar.

Teniendo todo esto en cuenta, Unánimo me gusta, me resulta interesante y útil en mis intervenciones individuales y grupales.

Así que, si estáis pensando en buscar un juego para grupos, para disfrutar en familia, para aplicar en el aula, en intervención psicopedagógica o en talleres grupales, así como en contextos sociales y educativos, os lo recomiendo.

Por último, os recuerdo que podéis encontrar más artículos sobre juegos de mesa y adaptaciones en la categoría Aprendizaje basado en Juegos. Si quieres orientación sobre cómo aplicar y adaptar juegos a vuestras necesidades y contexto, contáis con el servicio de asesoría para profesionales.