Mis juegos básicos con adolescentes es el segundo artículo de una serie de textos, en los que os comparto un poco de mis intervenciones. En concreto, son artículos en los que os presento algunos juegos básicos que empleo en mis intervenciones.

Repito… Son mis básicos. Esos juegos de mesa que me ayudan en mi intervención, que me permiten incidir en un objetivo concreto. Objetivo diseñado previamente en la planificación de la sesión.

Evidentemente, esos juegos se pueden emplear para disfrutar con menores. Sin más objetivos, con el fin de pasarlo bien. Pero, como sabéis, debido a lo que comparto en este blog, los juegos son un recurso más entre mis herramientas de intervención. Recuerdo, un recurso más, no el único.

En el primer artículo de esta serie, Mis básicos de intervención, os hablé de juegos que empleaba con los más peques (de 4 a 10 años aproximadamente). Aunque, he de decir que también los empleo con más mayores, siempre teniendo en cuenta las características de las personas con la que intervengo.

En este artículo, os hablaré de algunos básicos que me acompañan con adolescentes. Juegos que utilizo en los primeros encuentros para conocernos un poco, o en sesiones en las que tengo un objetivo definido. Y sí, también los empleo para arrancar o finalizar una sesión con el único objetivo de pasarlo bien.

Sin más, ahí van mis básicos con adolescentes.

STORY CUBES. Juego de la editorial Asmodee y que ya os mencioné en el artículo previo a este. Como comenté, con este juego podemos conocernos un poco más, explicar cómo somos, nuestros gustos e intereses. Y sí rompemos la imagen que tienen muchos adolescentes de lo que es ir a la psicóloga.

IKONIKUS de Manu Palau y Brain Picnic es un básico para las emociones. No me cansaré de decir esto. Es un juego que no puede faltar en mi ludoteca de trabajo. El uso de este juego con adolescentes me permite llevar a cabo reflexiones y análisis muy importantes sobre su estado emocional, gestión de las situaciones y de sus emociones.

THE MIND. Este juego de la editorial Mercurio se ha convertido en un «pique» para muchos de mis adolescentes. Esa necesidad de subir de nivel, avanzar, ver la conexión entre las personas que están jugando…

The Mind me permite pasarlo muy bien con menores, pero también me aporta mucha información acerca de sus impulsos, gestión del liderazgo, análisis de la comunicación no verbal, frustración, etc. Todo esto, además nos conduce a conversaciones posteriores a la partida muy interesantes. En el artículo, «The mind y un grupo de adolescentes. Una experiencia para aprender y disfrutar», os cuento mi experiencia con un grupo de adolescentes que asistían a uno de mis talleres de habilidades sociales.

CÓDIGO SECRETO. Este juego con diversas variantes, de la editorial Devir, es un clásico en mis intervenciones individuales y grupales. Además, está la versión dúo, que para intervenciones individuales es un gran recurso.

Código secreto me permite conocer las interpretaciones y análisis que las personas adolescentes hacen de la información que tienen ante ellos. Además, de indagar acerca de por qué y cómo hacen sus elecciones. Toda esta información es tratada a posteriori de la partida, donde hacemos la valoración de por qué se han elegido unas u otras, las categorías, etc.

MISIÓN CUMPLIDA. Una de las incorporaciones del último año a mi maleta de recursos ha sido Misión cumplida de Zacatrús y Brain Picnic. Juego muy sencillo de explicar, rápido de jugar y que engancha con el objetivo de superar retos.

He de confesar que Misión cumplida me permite finalizar una sesión de manera agradable. Sin embargo, empleado en una sesión me permite ver el liderazgo y el desenvolvimiento de algunos menores a la hora de resolver las misiones, buscar y aportar información a los compañeros, etc.

Como siempre os digo, estos juegos de mesa son un recurso que empleo en mis intervenciones. No son el único recurso, es un recurso más entre muchos otros que utilizo en mis intervenciones. Y por supuesto, el uso del juego ha sido analizado y valorado previamente para cumplir un objetivo en la intervención.